¡Abajo la represión asesina contra la huelga de maestros de Oaxaca!

¡Romper con los partidos de la patronal: PRI, PAN, PRD!

15 de junio--Tras los criminales ataques contra los paros mineros en Lázaro Cárdenas y contra los campesinos de Atenco, por tercera vez en ocho semanas el estado desató ayer la represión asesina, esta vez contra los maestros de Oaxaca, organizados en la Sección 22 del SNTE (perteneciente a la disidente CNTE), que han estado en huelga desde el 22 de mayo en demanda de salarios dignos. Hasta 80 mil maestros han participado en protestas combativas para ganar la huelga, exigiendo mayores recursos para la educación pública y lanzando consignas contra el gobierno priista. A las 4:50 de la mañana de ayer, el gobierno estatal del PRI desató a unos 3 mil policías con armas de fuego, granadas de contusión y de gas lacrimógeno, apoyados por al menos un helicóptero lanzando granadas de gas, para desalojar el plantón que los maestros mantenían en el centro de la ciudad. Poco les importó la presencia de muchos niños, hijos de los maestros. El saldo de este atroz ataque, según la dirigencia magisterial, fueron dos profesores y dos menores muertos (existen informes que indican hasta diez muertos). Más de 90 personas resultaron heridas y un número indeterminado fueron detenidas.

Entre los detenidos se encuentran el profesor Eduardo Castellanos Morales, el estudiante universitario Acelo Ruiz Méndez y Oziel Martínez Martínez, a quienes se les levantaron cargos tan ridículos como siniestros por terrorismo y portación de armas de fuego y explosivos. El gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz Ortiz, sostiene la transparente patraña de que la policía encontró rifles de asalto AK 47 y una mochila llena de granadas en el edificio de la Sección 22. Parafraseando al general Anaya, si los maestros hubieran tenido tal arsenal, los policías jamás habrían llegado hasta allí. En realidad, como hicieron los mineros de Lázaro Cárdenas en abril pasado, los maestros lucharon heroicamente con piedras y palos contra la policía --y lograron recuperar la plaza principal de Oaxaca--. La Jornada (15 de junio) reportó: “Mientras los maestros recogían los despojos de sus pertenencias, mostraban con indignación las huellas de la batalla: almohadas, comida, televisores quemados, casas de campaña cortadas a navaja, pañales, andaderas, mamilas, los juguetes de los niños...” Trabajadores del aeropuerto han advertido que el gobierno está enviando a 700 elementos de la PFP para romper la huelga definitivamente. Los trotskistas del Grupo Espartaquista de México protestamos de la manera más enérgica posible este ataque y nos solidarizamos plenamente con la huelga de los maestros. ¡Libertad inmediata a todos los detenidos! ¡Abajo todos los cargos! ¡Victoria a la huelga del magisterio!

Las depauperadas masas mexicanas sienten intensamente la necesidad de educación; los maestros tienen una larga historia de combatividad y establecen un vínculo entre los poderosos sindicatos industriales y el campesinado pobre. Los maestros de Oaxaca --uno de los estados más pobres del país-- y de México entero, recibiendo salarios miserables, luchan bajo condiciones horrendas por proporcionar educación a niños que a menudo no tienen ni qué comer. Especialmente en las zonas rurales, las más de las veces ni siquiera existen edificios escolares, y los maestros enseñan en miserables chozas o dentro de camiones abandonados, careciendo de libros y todo tipo de materiales educativos elementales. Apenas el 45 por ciento de los estudiantes termina la secundaria. Más de 2 millones de niños indígenas entre 6 y 14 años de edad no saben leer ni escribir. Esto da una idea de por qué la huelga estudiantil de la UNAM de 1999-2000 en defensa de la gratuidad de la educación fue tan explosiva y despertó simpatía y apoyo masivos entre los obreros y las masas empobrecidas. La lucha de los maestros de Oaxaca es la lucha de la clase obrera en su conjunto. ¡Un golpe contra uno es un golpe contra todos!

 Muchos obreros y gran parte de la población pobre en general ponen sus esperanzas en el PRD como una alternativa a las rapaces políticas económicas del PAN. Mientras que la población se encuentra altamente polarizada en la víspera de las elecciones, los partidos burgueses están unidos como uña y carne en la represión contra los obreros y los pobres. Y es que el interés elemental de los partidos burgueses, PRI, PAN y PRD, así como de sus diminutos competidores, es mantener el sistema de explotación y opresión capitalista. Como advertimos en Espartaco No. 25 (primavera de 2006), el PRD “es un enemigo de la clase obrera. Como ha hecho ya en el D.F., en caso de ganar la presidencia administrará al nivel nacional la brutal explotación capitalista y no dudará un segundo en desatar la fuerza represiva del estado contra quienes hoy lo apoyan.” Así, el 20 de abril, PRI, PAN y PRD se unieron en un fallido ataque policiaco para romper la huelga del poderoso sindicato minero-metalúrgico --cuyas movilizaciones recientes representan el estallido de lucha de clases más importante en la última década-- en Lázaro Cárdenas, donde dos obreros resultaron muertos. El 4 de mayo, en un intento por decapitar la combativa organización de los campesinos de Atenco, el Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra, los tres principales partidos burgueses se unieron una vez más, enviando a al menos 3 mil 500 policías para ocupar el pueblo de San Salvador Atenco, Estado de México, matando a dos jóvenes, deteniendo a más de doscientas personas, golpeándolas salvajemente y violando a al menos siete mujeres.

Esta escalada de violencia estatal representa un intento por parte de los tres partidos capitalistas de intimidar y aplastar a cualquiera que perciban como su oponente, y a fin de cuentas se dirige contra la clase obrera, sus organizaciones y su derecho a la huelga. La burguesía entera está temerosa por la amenaza de explosiones sociales ante la creciente polarización en torno a las elecciones presidenciales que se llevarán a cabo dentro de poco más de dos semanas, y está tratando de eliminar los llamados “focos rojos” de la manera más abierta, cínica y criminal. La clase obrera debe defenderse decisivamente de esta ofensiva patronal asesina. La UNT y otras agrupaciones sindicales habían convocado ya hace tiempo a un paro nacional el día 28 de junio en solidaridad con los mineros-metalúrgicos y en defensa de la autonomía sindical. Hernández Juárez, dirigente telefonista y de la UNT, ha refrendado este llamado ante la represión estatal en Oaxaca. En los noticieros televisivos de esta mañana, algunos comentaristas burgueses se mofaban de este llamado, dado que la UNT ha convocado en el pasado reciente a diversos paros nacionales que simplemente no suceden o son tan débiles que pasan casi desapercibidos. Pero la clase obrera --varios de cuyos sectores estratégicos están organizados en la UNT-- tiene un inmenso poder social que le permite paralizar la economía entera. Es necesario que la clase obrera flexione su poderoso músculo contra la represión sangrienta, en defensa de sus organizaciones sindicales y el derecho elemental a la huelga. ¡Todos a parar este 28 de junio!

La clase obrera debe abandonar toda ilusión en los partidos de la patronal. Es necesario forjar un partido obrero revolucionario que dirija a la clase obrera en la lucha por aplastar el asesino sistema capitalista, que se basa en la búsqueda de ganancias, y remplazarlo con el régimen de los obreros. Sólo así se terminará, de una vez y para siempre, con la asesina violencia estatal dirigida contra los obreros y los pobres. Ése es el propósito del Grupo Espartaquista de México, sección de la Liga Comunista Internacional (Cuartainternacionalista). ¡Victoria a las huelgas de los maestros y los mineros! ¡Abajo los cargos contra Napoleón Gómez Urrutia y todos los mineros bajo proceso! ¡Libertad inmediata a todos los detenidos de Atenco y Oaxaca!

Grupo Espartaquista de México