EPN, peón de EE.UU., contra Venezuela

El gobierno mexicano se ha alineado obedientemente tras sus amos imperialistas de EE.UU. en su añeja campaña por derrocar al gobierno chavista venezolano. La renovada arremetida imperialista se dio tras la convocatoria de Maduro a una asamblea constituyente, la cual implica la disolución del congreso dominado por la oposición derechista respaldada por EE.UU. En contubernio con la CIA, los responsables de la masacre de Ayotzinapa y tantos otros crímenes llaman a Venezuela a respetar los “derechos humanos” y a cancelar su convocatoria a la constituyente, y se han sumado a las sanciones contra funcionarios venezolanos impuestas por Washington.

Contra la oposición derechista, sus titiriteros imperialistas y los peones mexicanos, apoyamos las reformas sociales favorables a los oprimidos llevadas a cabo por los gobiernos populistas venezolanos. Al mismo tiempo, entendemos que estas medidas no son socialistas: el gobierno venezolano es un gobierno burgués comprometido a la defensa del régimen capitalista. Sin darle un ápice de apoyo político a Maduro ni secundar en absoluto a su constituyente (ver “Por qué rechazamos la consigna por una ‘asamblea constituyente’”, Spartacist [Edición en español] No. 38, diciembre de 2013), nos oponemos intransigentemente a la injerencia imperialista, sea directa o a través de sus subordinados mexicanos. Por toda América Latina, la genuina liberación del yugo imperialista pasa por la construcción de partidos leninistas-trotskistas, forjados en contraposición al populismo burgués, para luchar por revoluciones socialistas. ¡EE.UU. y sus lacayos, manos fuera de Venezuela!