Espartaco No. 25

Primavera de 2006

 

¡Gobierno, manos fuera del sindicato minero!

Reimprimimos aquí un volante publicado el 11 de marzo.

El Grupo Espartaquista de México, una organización marxista revolucionaria, protesta enérgicamente contra el ataque del gobierno al sindicato minero-metalúrgico y se solidariza plenamente con la lucha de estos obreros. La búsqueda insaciable de ganancias de los patrones mineros llevó a 65 obreros a la muerte en la mina de Pasta de Conchos, Coahuila, en una explosión ocurrida el 19 de febrero. Ante la furia e indignación de las familias de esos mineros, sus compañeros, importantes sectores del proletariado y de la población en su conjunto, el gobierno lanzó un ataque rompesindicatos, destituyendo al dirigente nacional del SNTMMSRM para remplazarlo con un burócrata más de su gusto, levantando cargos contra el líder sindical y congelando las cuentas bancarias del sindicato. Ésta fue una medida transparente y calculada del gobierno para desviar la atención de sí mismo y la compañía minera Grupo México, quienes son directamente responsables de esta atrocidad. No satisfechos con haber conducido a los mineros a la muerte a través de su criminal negligencia y superexplotación, ahora también quieren destruir su sindicato.

El sindicato respondió al fuego con una pequeña probada de su poder social —paros escalonados a nivel nacional que duraron alrededor de 40 horas y movilizaron a más de 270 mil obreros protestando el ataque gubernamental y exigiendo mejores condiciones de trabajo y salarios que ocasionaron pérdidas estimadas en más de 17 millones de dólares a los patrones chupasangre—. Más de 30 mil obreros del SME, la CROC, la CROM, y la UNT marcharon ya el martes 7 de marzo en la Ciudad de México junto a los mineros y en solidaridad con ellos. El blanco de este ataque es el movimiento obrero en su conjunto. ¡Un golpe contra uno es un golpe contra todos! —llamamos a todos los trabajadores y a los oponentes de la explotación capitalista a oponerse a este ataque—.

La defensa clasista de los sindicatos requiere una lucha por su independencia completa e incondicional de la burguesía y su estado —la premisa para conseguir la democracia sindical y transformar a los sindicatos en organismos de lucha por los intereses de las grandes masas explotadas—. Esto significa romper con toda ilusión en los partidos patronales —el PRI, el PRD y el PAN—. Significa luchar por la construcción de un partido obrero revolucionario para aplastar el asesino sistema capitalista, que se basa en la búsqueda de ganancias, y remplazarlo con el régimen de los obreros mediante la revolución socialista internacional. Ése es el propósito del Grupo Espartaquista de México, sección de la Liga Comunista Internacional (Cuartainternacionalista) ¡Estado burgués, manos fuera del SNTMMSRM! ¡Abajo los cargos contra Napoleón Gómez Urrutia! ¡Abajo las represalias contra los obreros paristas!